Rumbo a los Ángeles cómo líderes de la NBA

Aún con las lesiones presentes en el equipo, Paul Pierce será baja por 2 semanas casí, Marquis Daniels sin fecha aún, con Garnett tocado y con la vuelta de Glen Davis, los Boston Celtics fueron capaces de sobreponerse a una atmósfera de presión cómo es el Amway Arena de Orlando y ganar el choque de Navidad por 86 - 77.

Rivers mostró un quinteto titular compuesto por los habituales más Tony Allen que cubrió la baja por lesión de Paul Pierce, realizándo un buen trabajo con 16 puntos y 4 rebotes en 21 minutos de juego, no obstante no fue hasta el segundo cuarto cuándo empezó a dar muestras de sus números ya que hasta entonces había estado desaparecido y comentiendo muchos errores.

Los Boston Celtics comenzaban el partido algo faltos de ritmo, con una defensa regular y con una ofensiva muy atragantada. El segundo cuarto fue de ensueño, pudimos ver a los Celtics campeones, los de hace 2 años, con una defensa sofocante que tan sólo les dejo a los Magic anotar 8 puntos en 12 minutos, ingresándoles un parcial de 20 puntos por 8 de los de Orlando.

Los Magic tras la primera parte fueron poco a poco recuperándose, pese a tener a un Dwight Howard cargado de faltas y que acabó el partido con tan sólo 5 puntos, merced de la dura defensa impuesta por los hombres de Doc Rivers, al igual que Vince Carter que acabó la noche con 5 faltas.

Rasheed Wallace fue uno de los condicionantes de que Howard tan sólo anotase 5 puntos, ya que realizó sobre él una defensa durísima, cerrándo la noche con 8 rebotes y 11 puntos. Pero si de Sheed hay que hablar bien, de Rajon Rondo no hay palabras para describirle, está mostrándo un nivel de all-star y confirmándose cómo el mejor base de la Conferencia Este y si me lo permitís de toda la liga, tan sólo está a su nivel a mí parecer, Steve Nash.
Anoche Rajon Rondo, 17 puntos, 13 rebotes y 8 asistencias, pese a perder 8 balones y haber metido tan sólo 3 de 7 en tiros libres, no obstante la victoria puede achacársele en gran parte a él.

Ray Allen también realizó un buen trabajo anotándo 18 puntos y metiéndo la canasta que supuso el golpe definitivo para llevarnos la victoria. Casta de campeón y liderazgo es lo que mejor le define ya que siempre que ha de encestar la canasta más importante lo hace sin contemplaciones y sin apenas nerviosismo.


Kendrick Perkins jugó poco para dar más minutos a Rasheed, ya que además los árbitros parecen tenérsela jurada y en 10 minutos se cargó con 3 faltas personales. No obstante en sus 20 minutos en cancha estaba realizando una gran labor, con 6 puntos, 3 tapones y 4 rebotes.

Mientras tanto Kevin Garnett, tuvo que abandonar el partido a falta de 2 minutos para el pitidio final a causa de un desafortunado intento de tapón que se saldó con una terrible caída de KG sobre el parquet que le mandó directo al banquillo, esperemos que no sea nada más que un susto y que para el próximo enfrentamiendo esté al 100% de nuevo. Garnett cerró el encuentro con 10 puntos y 7 rebotes, pese a no jugar un gran partido.

Por la banca, cada vez entiendo menos a Doc Rivers, anoche no sólo no sacó ni un sólo minuto a Lester Hudson sino que mantuvo a Scalabrine 16 minutos sobre el Amway Arena sin hacer absolutamente nada y mantuvo a Shelden Williams sentado 36 minutos de los 42 que el partido duró. Eddie House sigue con sus grandes partidos, anoche anotó 5 puntos tras haberse tirado 4 triples y no encestar ni uno.

Cómo sorpresa, la reaparición de Glen Davis que estuvo en la cancha 3 minutos en los que capturó 3 rebotes. Aún es pronto para evaluarle pero anoche se le vió bien y con unos cuántos kilos de menos, esperemos que pueda seguir al mismo nivel que el de los pasados Playoffs.

En general victoria importantísima que nos alza de nuevo al liderato de la NBA, tras la derrota ayer de los Lakers en el Staples Center a manos de los Cavaliers de LeBron James, que hicieron enfurecer al público, que reaccionó lanzado almohadillas y botellines de agua a la cancha.

Así pues tras este vital partido que se ha saldado con el mejor resultado posible nos toca encarar ritmo a los Ángeles para jugar contra los Clippers este domingo. El lunes tocaran los Warriors y el miércoles los Phoenix Suns, con los que cerraremos el año 2009.